
Italia se ha vuelto tendencia en las últimas semanas. Bien sabemos que en Europa se está pasando por un momento inimaginable hace unos años atrás. Países se están revelando ante el socialismo y se están oponiendo fuertemente a esta ideología y a la corriente progresista que esta viene promoviendo. Italia no se está quedando atrás y el pueblo ha decidió votar por la derecha y su representante principal Giorgia Meloni.
Hace muchos años que en Italia no se establecía la derecha, tras años de socialismo y gobiernos tibios. Ahora en cambio el pueblo italiano ha optado por lo que los diarios llaman la “ultraderecha” lo que conllevaría a que por primera vez el pueblo italiano sea dirigido por una mujer. Sin embargo, sorprende que, ante lo que también sería un éxito feminista, este colectivo, que en teoría busca, el “empoderamiento femenino” ha decidido desaparecer de los medios, deseando que, en realidad, la situación nunca se hubiera dado. Demostrando, así como todo el colectivo feminista, no es nada más que una gran mentira.
¿Por qué? La razón es sencilla, sucede que, a la hora de la hora, el movimiento feminismo, se preocupa de las mujeres, únicamente cuando estas apoyan su agenda. Las mujeres serán celebradas en el poder únicamente cuando van acorde a las ideas socialistas “de manual”, que el colectivo feminista utiliza en todo el mundo. Sucede que, Meloni, es todo lo opuesto.
La probablemente futura primera ministra de Italia ha realizado una campaña con todo lo que el progresismo feminista está en contra. Uno de sus caballos de batalla fue el impulso de la religión, y como sabemos las de pañuelo verde o morado andan buscando “justicia” quemando iglesias por doquier, porque “la religión oprime a las mujeres”. Otra de las propuestas de su programa es la defensa de la natalidad, que en otras palabras podemos resumir como un no al aborto. Sabemos que para la actual ola del feminismo el aborto es un derecho inherente de la mujer, el cual debe ser defendido y propagado por todos los Estados -sin importar que eso signifique la muerte de un ser humano, al que ellos consideran nada más que un mero objeto-.
Otra de las premisas de Meloni es defender a la familia, lo que conlleva a no apoyar al lobby LGBT -y el resto de sus letras-. Un lobby que trata de implementar políticas de género que buscan que la sociedad se adecue a sus pensamientos, banderas y completamente desenfocada visión de la realidad; buscando sensibilizar al mundo para que le hagan caso a todas sus propuestas anti genéticas y anti biológicas. Que Meloni rechace todas estas políticas genera que se haya ganado el silencio de aquellas que dicen que buscan apoyar a todas las mujeres resilientes, luchadoras, independientes, y claro, progres. Que se hacen llamar, defensoras de la mujer.
El feminismo es selectivo. Te apoyarán y respaldarán mientras sigas una agenda, mientras cumplas con sus ideales. No les importa el empoderamiento femenino, no les importa que las mujeres ostenten cargos públicos. Quienes están detrás de esto solo quieren utilizar a la mujer como medio de su propaganda socialista-progresista. Con Meloni lo han demostrado, la mujer para el progresismo es solo un “arma” para difundir su pensamiento, solo un medio para recibir el respaldo de quienes se dejan convencer.
[Opinión] Franco Consoli
Fuente imagen: The Daily Beast
Que interesante!